lunes, 7 de abril de 2014

6 de Marzo de 2014 Deporte y Naturaleza: Cañada del Sereno

El pasado domingo militantes de la asociación cultural Granada No Conforme, tuvimos una jornada de deporte y naturaleza en el entorno del parque natural de la sierra de huétor. La ruta que realizamos se denomina Cañada del Sereno, aunque en nuestro camino hicimos un desvío para visitar la cueva de los mármoles, una cueva de origen natural.

Comenzamos la ruta con una pequeña subida pasando por la loma de los corrales, la cual debe su nombre a las construcciones de piedra que servían para refugio del ganado. En ella no resulta difícil evocar la dureza de estos páramos, especialmente en invierno.


Continuamos a media ladera del cerro para llegar hasta el mirador de la zarraca, dónde contemplamos las espectaculares vistas de sierra nevada completamente blanca e iluminada por el brillo del sol.





Desde el mirador, seguimos dirección norte atravesando nuevos barrancos, hasta conectar con la pista forestal de polvorite. Descendemos por una zona de umbría.


Poco después hacemos un alto en el camino para almorzar en una enorme pradera.


Posteriormente, nuestro camino discurre envuelto entre pinos negros, laricios y silvestres hasta llegar junto a la base del Cerro del Púlpito, una mole de roca caliza a modo de pirámide de 1426 metros de altura, que comparte grandeza con el Cerro de Garay, a la derecha; y con el Calar de los Mármoles, a nuestra izquierda.


Rodeamos el Púlpito y continuamos bajando hacia la fuente de la Teja, no sin antes hacer un pequeño desvío de la ruta y subir a visitar la cueva de los mármoles.



Rodeados bajo un manto de pinos resineros, encinas y quejigos, acompañados de madreselvas, ruscos y majuelos, descendemos para volver a nuestra ruta hacia la fuente de la Teja. La presencia de agua, además de acompañarnos con su música, acentúa la gran biodiversidad de este parque natural.


En formación:


Después de un merecido descanso en la fuente de la teja, descendemos por la pista acompañados por especies adaptadas a este entorno de ribera como alisos, sauces, álamos, juncos; o las zarzas e hiedras que se enredan y trepan. Y así llegamos hasta el mirador Las Veguillas, lugar desde el que contemplamos el barranco del Darro.


Siguiendo por el camino y dejando atrás este cauce, la pista nos lleva a donde empezamos.


Os dejamos una serie de fotos de paisajes que conforman la ruta:















No hay comentarios:

Publicar un comentario